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domingo, 9 de agosto de 2020

Arroz indonesio: Nasi goreng


Hoy os traigo uno de los platos nacionales de Indonesia, un arroz frito que se llama nasi goreng. Se puede hacer fácilmente en versión vegetariana (champiñones, verduras, frijoles, piña...), pero hoy lleva pollo. Es un plato ideal para reciclar sobras de arroz hervido.

No es nada difícil, pero es importante tener los ingredientes correctos para poder recrear los sabores originales. Es común acompañarlo de huevo revuelto o un huevo frito, pan de gamba (keropok) y tomato y pepino.
Los ingredientes que le dan el color y el sabor característico son kecap manis, que es una salsa de soja dulce y espesa y pasta de gambas, normalmente en aceite de soja, y conocida como terasi (en indonesio), belacan (en malayo), mam tom (en vietnamita), kapi (en tailandés), o bagoong alamang en tagalog. 

Esta receta rinde mucho; con estas cantidades salen en teoría da para 2 platos, según la receta original, pero yo digo que da más bien para 4-6. Yo hice el doble y sacamos 8 porciones.

  • 300 g de arroz de grano largo hervido 
  • 5 chalotas (según el tamaño, se pueden poner menos)
  • 2 dientes de ajo
  • 0,5 cucharadas de pasta de gambas
  • 1,5 cucharadas de salsa de soja dulce de Indonesia (Kecap manis)
  • 0,5 cucharadas de salsa de soja
  • 0,5 cucharadas de azúcar de palma (también vale panela o azúcar moreno)
  • 1 cebolleta (sin bulbo desarrollado)
  • 50 g de repollo
  • 150 g de pechuga de pollo
  • 1/2 guindilla 
Acompañamiento:
  • 2 huevos
  • 1 tomate
  • 1/2 pepino
  • Pan de gambas (krupuk udang)



La preparación:

* Lo primero es haber leído la parte donde digo que el arroz tiene que estar ya hervido. Lo digo porque yo estoy muy distraída y cansada últimamente y eché el arroz en crudo. 
En mi defensa, estoy de baja por enfermedad, es una de las primeras recetas que hago desde hace semanas y no doy pie con bola; solo pude hacer esta receta porque me ayudó muchísimo mi vikingo, pero bueno, evidentemente lo solucioné, añadiendo agua hirviendo, pero afecta el sabor del plato; tuve que rectificar y el sabor queda más aguado que si lo haces correctamente. Así que no cometáis el mismo error que yo.

1. Calentamos una cucharada de aceite vegetal en la sartén y freímos 2 de las chalotas en rodajitas hasta que queden crujientes. Reservamos.



2. Freímos también el pollo cortado en trocitos. Reservamos.

3. Batimos o trituramos las otras 3 chalotas, el ajo, la gundilla y la pasta de gambas.


4. Calentamos de nuevo aceite vegetal (de coco, en mi caso) a fuego medio en un wok o sartén antiadherente y freímos durante 2 minutos la pasta que acabamos de formar.


5. Incorporamos el arroz (¡hervido!), la salsa de soja dulce, la salsa de soja normal y el azúcar. Subimos el fuego y salteamos durante 6 minutos.


5. Añadimos la cebolleta en rodajas, el repollo en tiras finas y el pollo. Mezclamos bien y salteamos durante un par de minutos.

6. En ese tiempo freímos los dos huevos; sin mucho aceite, sobra con que la sartén esté engrasada.

7. Servimos el arroz bien caliente, yo lo meto en un cuenco y le soy la vuelta al cuenco para servir el arroz con forma de cúpula. Coronamos con el huevo frito, la chalota frita que habíamos reservado y un poco de cebolleta fresca. 


8. Alrededor servimos el tomate y el pepino en rodajas y pan de gamba, en el plato o a parte. ¡Listo!

 ¡Buen provecho!

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