Para las "patatas" de boniato:
- 1 boniato gordito y alargado (unos 200g)
- 1-2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal, pimienta y pimienta de cayena. Si estamos exóticos, también podemos probar con comino, curry, ajo en polvo u otras especias.
Para las patatas de gajo:
- Unos 200g de patatas pequeñas. Yo esta vez utilicé "patatas nuevas" (nye kartofler" en danés, "patata novella" en italiano), que son una variedad mucho más pequeña, con más vitamina C y menos calorías)
- 1- 1 y 1/2 cucharadas de pan rallado (en este caso probamos a hacerlas con pan rallado y con harina integral, pero nos gustó más la primera opción)
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Sal y pimienta
- 1-2 cucharadas de aceite de oliva
- Hierbas secas al gusto: perejil, tomillo, romero, orégano...
- Opcional: cebolla y ajo en polvo. Hay quien además de harina usa un poco de pan rallado.
La preparación:
- Se precalienta el horno a 230º.
- Lavamos el boniato, lo pelamos y lo cortamos en rodajas y después en tiras (como en la foto) de tamaño similar para que se cocinen a la vez.
- Lavamos las patatas y las cortamos (sin pelar) en forma de gajo: por la mitad en vertical dos veces (hacemos un corte en forma de cruz a lo largo). Si los trozos resultantes son muy gruesos, los cortamos una vez más a lo largo.
- Echamos en un bol el aceite, las especias y las patatas y después pasamos cada gajo por la harina o el pan rallado. Extendemos las patatas sobre una bandeja de horno con papel. Es buena idea engrasar el papel con unas gotitas de aceite y un pincel (o los dedos). Necesitan unos 40 minutos en el horno hasta estar doradas y tiernas, pero hay que ir comprobando. A mí cuando uso patatas muy pequeñas me tardan sólo 25-30 minutos. Dale a las patatas la primera horneada durante 10 minutos.
- Mientras tanto, echa los trozos de boniato en un cuenco, una bolsa de plástico o simplemente sobre papel de hornear (no papel de aluminio) en una bandeja para horno. Añade unas gotitas de aceite por encima y las especias al gusto.
- A los 10 minutos, saca la bandeja del horno y distribuye los trozos de boniato sobre papel de horno en una bandeja de forma que no se monten unas sobre otras y deja preferiblemente algo de espacio entre unos y otros para que acaben crujientes.
- Mete al horno durante 15 minutos y tras ese tiempo, dales la vuelta y devuelve al horno hasta que pasen unos 10 minutos más (hay que probar para ver si están hechas y crujientes) El boniato es dulce, así que si las esquinas se ponen más oscuras que el resto, más que a quedado sabrá caramelizado.
- En total, las patatas pueden llevar sobre 40 minutos y el boniato sobre 30 minutos, pero como digo, según el tamaño de los trozos y el horno, cada proceso puede llevar hasta 10 minutos menos. Es importante ir comprobando. Cuando ambos componentes estén listos, ¡ya tenemos plato!
Resumen: Cortar patatas y boniato; empanar las patatas; hornear 10 minutos las patatas; hornear todo 15 minutos; dar la vuelta; hornear todo 5-15 minutos.
¡Buen provecho!
Dato:
El boniato es un alimento de bajo contenido graso, pero muy rico en vitamina A. Es un 70% agua en su composición y aporta proteínas.
La piel de la patata no hay porqué desperdiciarla, ya que nos aporta una cantidad elevada de vitamina C, potasio, hierro, zinc, fósforo y magnesio.
La inspiración para esta receta me vino de mano de Kate: http://cookieandkate.com/2010/baked-sweet-potato-fries/
Me encantan las "versiones" de comidas tradicionales cambiando ingredientes para convertirlos en "light" XD
ResponderEliminarEste año descubrí el potencial de los boniatos y las calabazas. No tenía ni idea de lo bajos en calorías que son y de que son tan ricos y nutritivos por otro lado.
Me gustan mucho mucho mucho, de verdad.
Así que nada, menos patatas que son pura fécula e hidratos, y más patatas dulces ;)
Muchas gracias por la receta ¡ÑAM!
thank you for sharing
ResponderEliminar