Caracolas de canela integrales (Fuldkornskanelsnegle)

Estos rollitos son muy típicos en Escandinavia. He adaptado la receta porque la original es una bomba de relojería ;) Esta vez me he decidido por reducir la mantequilla combinando con sirope, pero voy de vez en cuando haciendo pruebas para sustituirlo por puré de manzana, que es un sustituto genial de la mantequilla en horneado.

• 150g de mantequilla o margarina líquida
• 2 dl de leche de avena natural (sin sabor)
• 25g de levadura fresca o de panadero
• 200g de harina blanca
• 350g de harina integral
• 2 cucharadas de miel
• 1-2 huevos (uno para decorar, si queremos)
• 1 cucharadita de cardamomo en polvo

Para el relleno:

• 50g de mantequilla líquida 
• 50g de sirope (gradación B; es más puro)
• 90g de azúcar moreno mascabado (es integral)
• 2-3 cucharadas de canela en polvo

Preparación:

1. Calentamos la leche hasta 37-38º, es decir, tibia, que no queme. A continuación vertemos la leche en un bol y derretimos la levadura en ella.

2. Añadimos el resto de ingredientes: las dos harinas, la miel, la mantequilla derretida, el cardamomo y un huevo. Mezclamos con un tenedor y trabajamos con las manos para asegurarnos de que todo se mezcla de forma uniforme y la masa toma forma.

3. Cubrimos el bol con papel film o con un paño húmedo y dejamos que leve durante 1 hora, preferiblemente en un lugar de temperatura templada, por ejemplo, podemos encender el horno y dejar el bol sobre los fogones para que le llegue el calor.

4. Pasada la hora, nuestra masa debe tener un tamaño 3 o 4 veces más grande. La volvemos a amasar para desgasificar y la dividimos por la mitad, quedándonos 2 partes iguales de masa. A partir de este paso, se pueden trabajar las 2 partes al mismo tiempo o se puede hacer todo el proceso con una y luego con la otra.

5. Hacemos 2 rulos y con un rodillo los estiramos hasta conseguir darle a la masa una forma más o menos rectangular.

6. A continuación preparamos el relleno mezclando los ingredientes bien. El relleno se esparce por la superficie de la masa con un pincel o una espátula de silicona, preferiblemente.

7. Acto seguido, comenzamos a enrollar la masa sobre sí misma por la parte más larga hasta llegar a la otra orilla.

8. Una vez enrollado, cortamos trozos de unos 2 cm con un cuchillo grande y afilado y los vamos colocando sobre papel de horno en una bandeja para horno.

9. Dejamos las caracolas reposar 30 minutos al menos antes de meterlas al horno. En ese tiempo, crecerán algo más.

10. Pasado ese tiempo, si queremos pintarlas con huevo, lo hacemos. Esto simplemente hará que queden más tostadas por arriba, como veis en las fotos. Si os gustan más blanquitos, prescindid de este paso.

11. Finalmente, se hornean a 200º en posición de ventilador durante 12-15 minutos. Nada más sacarlos del horno, se colocan sobre una rejilla para que reposen y se vayan enfriando sin sudar. Cuando se vayan a comer se pueden espolvorear con azúcar de caña o azúcar glas, por ejemplo. 

Las que nos sobren podemos guardarlas en un envase hermético o congelarlas. En cualquier caso, para recalentarlas, se enciende el horno a 180º y cuando esté caliente, se apaga y se dejan las caracolas dentro durante un par de minutos.

 ¡Buen provecho!

Bergua*

Para la receta original sin reducción de mantequilla y con harina blanca: http://macarenahenriksdatter.blogspot.dk/2012/05/cocinando-con-macarena-skillingsboller.html

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