El título ya lo dice todo, pero por si quedan dudas, os chivo que además es facilísimo y está muy rico, tanto frío como aún calentito. Aquí en el norte, este tipo de pastel se come a la hora del té o el café y se suele servir con nata montada o nata agria (creme fraiche). En España este bizcocho sería un desayuno de domingo.
- 1/2 kg de manzanas (royal gala o reineta son buenas opciones)
- 1 yogur natural, de limón o de pera
- 120g de azúcar mascabado o azúcar moreno (O la mitad de siropre de ágave)
- 150g de harina de panadero o de fuerza (con alto contenido proteínico, que leva más)
- 15g de levadura química (1 cucharada)
- 2 huevos
- 1/2 cucharadita de canela
- 1 limón
- 20g de mantequilla o margarina
- 1 cucharada de zumo de limón
- 2 cucharadas de agua
- 1 cucharada de azúcar mascabado o moreno
La preparación:
2. Batimos el yogur y el azúcar con unas varillas. Añadimos los huevos y batimos también.
4. Lavamos y pelamos las manzanas y las cortamos en 4 cuartos que cortamos a su vez en rodajas más finas con forma de media luna. Les echamos unas gotas de limón para que no se oxiden.
5. Encendemos el horno a 200º en posición ventilador.
6. En el molde para horno vertemos la mitad de la mezcla y, sobre ella, distribuimos una capa de manzana (o 2, si los trozos son muy finos). Podemos espolvorear con un poco de azúcar o añadir unas gotitas de miel o sirope de ágave, para que quede más dulce.
7. A continuación vertemos el resto de la masa, la distribuimos y sobre ella colocamos otra capa de manzana (o 2). Repartimos estratégicamente unos trocitos de mantequilla por la superficie.
8. Horneamos a 200º durante unos 45 minutos. Hay que estar pendiente tras los primeros 30 minutos. Si la superficie amenaza con quemarse, cubrimos con papel de plata para que no le de el calor directo pero el interior siga cocinándose. Para saber si está hecho por dentro, como siempre, se introduce un cuchillo finito o un palillo largo y si sale limpio, está hecho.
9. Sacamos del horno, dejamos enfriar y mientras tanto en una olla ponemos al fuego 2 cucharadas de agua, 1 de limón y 1 de azúcar moreno. Lo disolvemos y pintamos la superficie del pastel con la mezcla.
¡Buen provecho!
Bergua*