¡Sígueme! =)

domingo, 20 de noviembre de 2016

Kéiskuch: tarta de queso luxemburguesa


Advertencia: Esta receta no es especialmente ligera; más bien lo contrario. Peeero es una tarta de queso distinta a las variantes populares en América y Europa; crujiente por fuera, esponjosa por dentro... Rica y especial. Esta receta es una parada más de los viajes a los que nos vamos con Cocinas del mundo. Esta vez nos vamos hasta Luxemburgo y de ahí traigo esta maravillosa tarta de queso. ¡Madre mía, ya vamos por la "x", se nos está acabando el abecedario!


Casi nos quedamos sin probarla porque le tengo respeto a eso de preparar dulces (además yo soy más de salado) y porque la mano izquierda me funciona solo a medias y no sabía si podría hacerlo. Pero me lo tomé como una forma de rehabilitación casera y me alegro de haberme atrevido, porque desde luego valió la pena y me hizo sentir muy satisfecha. Eso sí, menos mal que hice dos pequeñas en lugar de una grande, porque la de reserva acabó boca abajo en el suelo.
La receta la saqué de aquí, aunque por supuesto hice algún cambio; por ejemplo, el queso quark que encontré era una especie de postre de sabor a fresa, así que mi tarta de queso tenía un ligero gusto a fresa.

Para la base:
  • 250 g de harina
  • 125 g de mantequilla sin sal fría
  • 80 g de azúcar
  • 1 huevo M
  • 2 cucharadas de queso fresco quark (en su defecto requesón, yogur griego o queso fresco batido cremoso), en mi caso con sabor a fresa
  • Una pizca de sal

Para el relleno:
  • 500 g de queso fresco quark (en su defecto requesón, yogur griego o queso fresco batido cremoso), en mi caso con sabor a fresa
  • 100 ml de nata para montar, 35-38%
  • 135 g de azúcar
  • 4 yemas de huevo
  • 2 claras de huevo
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • Opcional: azúcar glas

La preparación:

1. En un cuenco vertemos la harina y la mantequilla cortada en cuadraditos del tamaño de una uña. Mezclamos con el accesorio de amasar de la batidora o algún robot de cocina.


2. Añadimos el resto de los ingredientes de la base: el huevo, el azúcar, la sal y las 2 cucharadas de quark. Volvemos a mezclar con el accesorio de amasar. Conseguiremos una masa rugosa y un poquito pegajosa, pero no mucho.


3. Sacamos la masa, formamos una bola, la envolvemos en papel transparente de cocina. Le damos 30 minutos en el friforífico (la nevera).


4. Pasado ese tiempo sacamos la masa del frigo. Sobre papel de horno la extendemos y la vamos extirando y aplanando con las manos y, si queremos, un rodillo. Con un poco de harina evitaremos que la masa se nos pegue.


5. Entonces engrasamos el molde (desmontable). Yo uso un espray de cocina y luego lo restriego con un pincel de cocina o con la mano por el fondo y por las paredes. Lo siguiente es pasar la base al molde. Hay distintos métodos; podemos recortar la masa con el papel y conservar el papel en el molde. O podemos despegar la masa del papel e ir trasladando primero el círculo de la base y luego las paredes. Con los dedos nos aseguraremos de unir ambas partes y que no queden agujeros.


6. Cubrimos el molde con papel transparente y le damos 30 minutos más en el frigo.

7. Mientras tanto preparamos el relleno. Separamos las yemas de las claras. Hay muchos trucos; yo simplemente me abro el huevo en la palma de la mano, dejo que la clara se me escurra entre los dedos y conservo la yema en la palma.


8. En un cuenco mezclamos todos los ingredientes del relleno excepto la nata y las claras: azúcar, yemas, queso quark y esencia de vainilla. Lo mezclamos con una espátula o varillas de mano.

9. Montamos las claras a punto de nieve y batimos la nata hasta que salgan burbujas.


10. Añadimos primero la nata a la mezcla del relleno y mezclamos un poco.

11. Entonces añadimos las claras y mezclamos con unas varillas de mano y movimientos envolventes.

12. Es el momento de sacar la base del frigo y echar el relleno. 


13. Necesita unos 60-90 minutos en el horno precalentado a 180º. En teoría es 1 hora, pero las mías tardaron más en cuajarse, por la potencia o lo que fuera. Yo las horneé con un trozo de papel de horno por encima para que no se quemaran por la parte de arriba.

14. Pasado ese tiempo, pinchamos con un palillo o un cuchillo y, si sale limpio, será que ha cuajado y la podemos sacar. La dejamos enfriar antes de sacarla del molde.

15. Una vez fría, pasamos un cuchillito por los bordes para que sea más fácil sacarla sin romperla. La desmoldamos y espolvoreamos si queremos con azúcar glas. Se le puede dar la vuelta al servirla o servirla con el lado abierto hacia arriba. A vuestro gusto.


¡Sígueme en facebook! 



10 comentarios:

  1. Buenos días,
    Me gusta mucho tu receta. Creo que estoy viendo un lujo de versiones, aunque hayamos repetido algunas, además solo ver tu foto me entran ganas de tener una trozo al lado, que todavía no he desayunado. Bss y nos vemos en la próxima.

    ResponderEliminar
  2. Como le decia a otra compi, las tartas de queso con quark son otra cosa! Para mi le da un toque tan especial que no lo consigues con otros. Mmmmmmmmmmm me llevo un trocitin para la merienda! Un besito

    ResponderEliminar
  3. Curiosamente nunca he usado el queso quark para hacer recetas, habrá que ponerle remedio urgente, jijiji. Muchas gracias por haber participado, sabemos el esfuerzo que te ha supuesto.
    Besitos

    ResponderEliminar
  4. Podemos decir que estas teniendo una dulce rehabilitación, desde luego esa tarta bien merece el esfuerzo.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  5. De momento soy incapaz de quedarme con un solo nombre de lo leído, pero me importa na de ná, lo que mola es el resultado y este tuyo, con queso se llame como se llame me mola mogollón.

    Besitos

    ResponderEliminar
  6. Totalmente desconocido para mí pero seguro que esto es verdaderamente una delicia, sólo hay que verlo!!

    ResponderEliminar
  7. hemso coincidido, tu tarta tiene una pinta insuperable, felicidades¡¡¡¡
    un abrazo
    Concha

    ResponderEliminar
  8. La tengo en la recámara porque me encantan las tartas de queso y era una opción para preparar, pero la sopa de judías ganó jeje...
    Pero esta tarta la haré cualquier día.
    Besos
    Nieves

    ResponderEliminar
  9. Hola Estela. Esta tarta que has preparado tiene un aspecto fabuloso. Aunque no abuso del queso puedes estar segura de que me comería un trozo de esta tarta porque creo estará deliciosa.
    Desde hoy tienes un seguidor más.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. Bergua llego tardecito pero acá estoy feliz viendo esta rica receta. Además de la terapia que has tenido haciendo las dos, que bueno que seas precavida ^_^ a pesar de todo el desafío creo que te ha quedado increíble, tengo pendiente de preparar una tarta de estas, porque vale la pena darse un gustico ^_^. Con sabor fresa, interesante combinación, a propósito lindos duendecillos.

    Besos

    ResponderEliminar